No os imagináis las ganas que tenia de hacer una canal, y después de dos semanas que había peligro de aludes, por fin parecía que había llegado la hora, sabíamos que había poca nieve pero bueno, había que probarlo.
Liamos a nuestro amigo Jordi, que no es muy difícil de convencer porque se apunta a un bombardeo.
El sábado lo habíamos pasado esquiando en Pas de la Casa con la madre de Laia, y el domingo lo reservamos para ir a la sierra del Cadí, la canal elegida era la de L´Ordiguer.
Saliendo desde Prat del Cadí, nos esperaba un camino helado, lleno de resbalones, que en un par de horas nos dejaría a pie de canal.
Laia empezó a tener problemas con las botas,le dolián bastante los pies, opto por darse media vuelta y esperarnos en Prat de Cadí, y dejarnos a Jordi y a mi continuar con nuestra aventura.
Una vez llegamos a pie de canal empezamos a sacar los hierros y cuerdas y nos ataviamos para la ocasión. Cual fue mi sorpresa al empezar la canal, había hecho el pardillo, había ido cargado con friends, fisureros, pitones, tornillos de hielo, cuerdas, etc, y resulta que la pendiente no requería prácticamente nada.
No sería la única sorpresa, ya que después de unos metros de canal, tras una curva nos esperaba una amarga sorpresa, una piedra enorme en medio de la canal, ¿Quién habría sido el desgraciado que la había puesto allí?, entre que nuestro nivel de escalada es nefasto y Jordi no llevaba explosivos, (para los que conozcáis a Jordi, que siempre lleva todo lo que hace falta).
Aquí podéis observar a Jordi intentado superar el paso de escalada.Bueno total, que nos dimos medía vuelta. Esta primera canal, nos pillo un poco de sorpresa pero la próxima vez la acabaremos.